Qué difícil es vivir atento
sin caer en el intento
de borrar todas las mareas
y algun que otro beso.
Complicado y sin aliento
me quedo en este momento
en que digo adios a lo que quería
y me lanzo al vuelo.
Es la vida, caprichosa como yo,
que me despierta cada día
con una aventura nueva que me desorbita
y marea con sus juegos a mi pobre corazon.
Adiós te digo
y no siento ya lo que te digo
lo pasado es agua pasada
y no quiero ni pensar en nada…
Qué dificil es olvidar enteros
los sentimientos más sinceros
y amor que siempre tuve
y siempre rechazaste.
Ocultarse en el cielo
por las nubes, un momento,
las estrellas que tanto tiempo
por el mar me guiaron.
Así es la vida, rencorosa y sin perdón,
que te guarda altiva
cada fallo que tuviste y pone en tu camino
la misma piedra con que lloré.
A Dios le pido
que deje de ser mi enemigo,
yo no quiero pero dije lo siento
y ya no quiero ni saber lo que intento.
Adios he dicho,
y me siento el peor enemigo
de este alma que tengo crucificada
y cada día me hiere sin calma.
Adios.